José Gregorio Torres – Muchos temas en Carache resultan espinosos para algunos dirigentes y funcionarios, quienes se embarcaron en el portaviones de Chávez y la revolución, con la arenga de la lucha contra la corrupción, pero que a la vista de todos, esto resultó toda una farsa, lo podemos ver cuando visitamos sectores y comunidades y empezamos a ver diferentes estructuras y desechos de maquinarias que de ser atendidas y utilizadas con el fin para el cual fueron adquiridas, no lleva obligatoriamente a hacer la acotación respectiva, pues cuando se empieza a investigar en muchos casos no se encuentra ni información ni responsables, y esto al final solo deja dudas de si quienes fueron los responsables directos e indirectos, están implicados en delitos de corrupción administrativa.
En este caso debo referirme a las famosas bloqueras comunales solidarias, de las cuales se hizo una gran alharaca, cuando los Concejos comunales, se vendieron como la panacea de la administración pública con participación de las comunidades, pues según la Ley que las crea es una ley muy específica en cuanto a sus funciones y responsabilidades, solo que estos fueron abandonados a la suerte, puesto que se convirtieron en estructuras en las cuales no se hicieron los procedimientos de contraloría social, pues estos se reservaron la autonomía y la discrecionalidad de sus funciones sometidas a una asamblea en la que se manipulan a las comunidades que en muchos casos sin realizar las asambleas de ley, se limitaban a recabar firmas casa por casa de miembros principales y algunos menos espinosos, para hacer lo que les place para beneficio de una o más personas. Pero no a la comunidad en general.
Así conocimos el caso que se hizo público y notorio de la primera invasión de Las Adjuntas conocido como San Juan I, donde presuntamente se perdieron doscientos millones de Bolívares, correspondientes al proyecto de vivienda para esa comunidad, hoy sin culpables, fue el primer gran robo realizado en Carache por los Consejos Comunales, pero esto no termina allí, también con la complicidad del propio estado, se aprobaron proyectos como el de las Bloqueras solidarias Comunitarias, donde estas estructuras Concejos Comunales, adquirieron al parecer, basura por maquinarias que permitieran la realización y ejecución de estos proyectos que beneficiarían a una gran parte de la comunidad, pues estas por autogestión realizarían los bloques para la construcción de las viviendas, hasta hoy no se sabe del paradero de muchas de esas maquinarias, así como otros equipamientos, carretillas palas y escardillas y trompos o mescladoras del concreto, algunas como muestra la gráfica solo son chatarra, pero nadie hace nada por rescatarlas o habilitarla, al parecer todo fue un fraude abalado por el mismo gobierno. No faltará quien diga que este es otro chisme de Elcarachero.com, pero con evidencia.
