Por. Javier Lugo
@javierlugo21
Al parecer, este año Pacheco se adelantó ya que a pesar que faltan tres meses para que llegue diciembre y posteriormente enero, los meses más fríos del año en Carache, la comunidad ha venido experimentando unos anocheceres con unos amaneceres extremadamente fríos, que son raros en este mes del año y que tiene a los caracheros tullidos. Pacheco es como popularmente se le llama en Carache al frió fuerte, nombre que seguramente proviene de la tradición caraqueña, basada en la historia popular de “Pacheco” que bajaba del Ávila en diciembre y por la temporada también coincidía con la llegada del frió a la ciudad capital, por lo que con el tiempo este hombre fue asociado con el frió, escuchando el comentario popular para referirse a la llegada del frió como “ya bajo Pacheco” dándole origen a la tradición capitalina de llamar al frió “Pacheco” y que se arraigó en muchas partes del país, incluyendo Carache.
Y aunque aquí no se cuenta con el Ávila para que baje Pacheco, está el Mupi que es la montaña emblemática y al igual que El Ávila, cubre toda la población en su extensión, con la particularidad que en Carache como decían los viejos de antes, Pacheco baja es de la Calera, debido a que todas estas corrientes frías claramente se sienten bajando de esa montaña con el frió que seguramente es traído de la comunidad de Loma de San Juan.
En las conversaciones de la gente en la calle se escucha el acontecer que este genera en la población, con comentarios como “Esta fuerte el frió”, “Si está haciendo frió y eso que no estamos en diciembre”, “Amanecí tullido esta mañana” y en algunos casos “El calentamiento global tiene los tiempos del planeta locos” entre otros que forman parte de la vivencia y por supuesto, de la extrañeza que esta ola de frió ha causado en la población por lo atemporal de su aparición.
Cualquiera que sea el motivo o el causal para que Pacheco haya decidido visitarnos en pleno agosto, sin duda alguna, es mejor para los caracheros estar tullidos por el frió, que abrazados por calor, esperando que estas condiciones climáticas extrañas, no se inviertan para la temporada navideña y de año nuevo, mientras tanto saquemos nuestros abrigos y disfrutemos de esta grata visita que nos dispenso Pacheco.