Por. José Gregorio Torres Artículo de Opinión
Hace aproximadamente cuarenta años, Carache, inició un cambio existencial, no solo a nivel cultural en términos de identidad, también comenzó una especie de revolución ideológica, donde su reconocimiento como una sociedad la cual, dentro de la identidad trujillana debía auto reconocerse y valorarse como una comunidad con un protagonismo muy característico, propio de su gente, el decir, del Carachero de a pie o a caballo, era igual de a pie o en un lujoso vehículo. Todo comenzó a finales del siglo pasado, cuando empezamos a conocer nuestra propia historia y descubrir el diamante en bruto que existe en nuestra sociedad, músicos, poetas, artistas, profesionales y una sociedad de productores agrícolas, que en su tiempo, hicieron famosos el nombre de Carache, con sus músicos y su parranda, los espárragos tan anhelados en la capital, pero también, la fresa que superó a la de la Colonia Tovar, su panela, y sus insuperables acemas Caracheras.
En esos días, hombre visionarios ocupaban nuestras principales instituciones, todavía impregnados de esa vocación de servicio, soñadores pero, conscientes de la necesidad de sentar bases con la esperanza que, más adelante, otros continuaran este legado, así nacieron instituciones como el Cuerpo de Bomberos Urbanos, hoy motivo de nuestra nota junto a Protección Civil, Bomberos Forestales, instituciones que actualmente, son responsables de la prevención, resguardo, rescate de vidas y bienes, la protección de la naturaleza y el ambiente, una misión encomiable que pocos aprecian, valoran en su justa dimensión, pues estos hombres, mujeres tienen la virtud de la sensibilidad ante el dolor ajeno, nada puede ser más valorado que el sacrificio de estos seres humanos, cuando ponen en riesgo sus propias vidas, en el cumplimiento del deber.
Estas semblanzas que adornan a estos jóvenes de Carache y de otras latitudes quienes, están permanentemente dispuestos a la lucha contra el fuego, a otros riesgos que son, en muchos casos extremos y que no por ello, dejan de cumplir cada día con sus servicios, siempre prestos a atender cualquier emergencia, así es la vida de estos valerosos hombres y mujeres que hoy cumplen una labor encomiable, y nos hace expresar la necesaria reflexión, ¿estamos actuando con conciencia plena de lo que significa la labor de nuestros cuerpos de seguridad y socorro?, acaso cuando una de estas comisiones asisten a una comunidad a atender una emergencia ambiental, ¿somos los vecinos solidarios atentos para darles a ellos la atención debida?, ¿cuántos de nosotros sacrificamos algo de nuestra comodidad para garantizarle que esos héroes coman y beban mientras atienden una emergencia, como las últimas acaecidas en la parroquia? cuatro incendios forestales en diferentes lugares de la geografía de Carache y se puede contar el grado de compromiso y solidaridad para estos protagonistas de la película, seguramente, hay sus excepciones, ejemplo, el caso de Río Arriba, donde la comunidad agradecida se volcó con atenciones no solo, desde sus residentes, sino también de quienes son dolientes y preocupados ciudadanos que desde otras ciudades hicieron y manifestaron su apoyo a estos funcionarios, expresando con ira y repudio la negligente acción de quienes pudieron hacer y no hicieron lo que es su obligación, surtir de manera pronta y efectiva los vehículos con el combustible vital para estas emergencias. Nada es perfecto, pero si corregible, estos héroes locales, se merecen sin lugar a dudas, nuestro sincero reconocimiento.
la gente no toma conciencia. Continúa quemando la basurita en sus hogares buscando que se salga de control y provoque una catástrofe Dios no lo quiera. Además de que es un delito ambiental, afecta a todos los vecinos. adultos mayores y niños asmáticos o con cualquier otra enfermedad respiratoria. no les ha servido de ejemplo los incendios de los últimos días q gracias a Dios no ha ocasionado pérdidas humanas pero si de la flora y fauna del municipio. Deberían sancionar a todos aquellos q por pereza de recoger la basura en un recipiente con tapa lo q hacen es quemarla. Y se excusan q es basurita. nota: La ignorancia de la ley no es excusa de su cumplimiento.
Un saludo afectuoso y de máxima solidaridad a este grupo de personas que no miran para los lados a la hora de brindarle protección a sus semejantes, aún poniendo en riesgo su propia vida. Hay que sembrar en el carachero un poco más de conciencia a la hora de colaborar con estas instituciones que fueron creadas para protegernos de cualquier desastre natural. Llegue hasta uds. nuestro fraternal agradecimiento por su gran desempeño en los eventos (incendios) ocurridos en nuestro municipio.