LAS VENAS DE LA PATRIA DE SIMÓN BOLÍVAR

Carlos Grillet ■ Cuando leí “Las venas abiertas de América Latina” del escritor y periodista uruguayo Eduardo Galeano en 1993, comprendí, luego, porqué Venezuela despertó a partir de 1999 cuando el comandante Hugo Chávez asume la presidencia de la república de manera democrática y el líder bolivariano logró, como formidable lector, pedagogo y comunicador, motivar a leerla. Galeano con estupenda argumentos investigativos, indagación histórica y recopilación bibliográfica pudo precisar y verazmente comprobar las atrocidades y el genocidio del imperio español a su llegada al nuevo continente sobre civilizaciones de aborígenes que por siglos fueron capaces de poseer la cultura de la producción alimentaria, una Cosmovisión genuina que integraba valores espirituales, de existencia y tradiciones ancestrales.


La complicidad de los grupos de poder inglés arbitrarios que, si bien poco toleraba la monarquía hispana, los objetivos – ambos con superioridad en armas y hombres – de adueñarse y entrometerse legal y políticamente en los asuntos de América de los incas, aztecas, mayas, caribes, waraos y yutpas no desestimaron la oportunidad de arrebatar territorios sin contemplación alguna, muchos, hoy, con daños cuestionables como el caso que intenta Guyana y la intromisión de inversionistas petroleros estadounidenses en desconocer y arrebatar el Esequibo a la República Bolivariana de Venezuela. No creo en la polarización que ha intentado imponer la devaluada política opositora ni el poder hegemónico dominante de los medios de comunicación. Lo que creo, profundamente, es que la mayoría de venezolanos y venezolanas leyeron “Las venas abiertas de América Latina” y la Constitución Bolivariana de Venezuela y seguro no van a permitir que persista la barbarie y abusos foráneos. “Las venas abiertas de América Latina” es una obra que despierta el sentimiento patrio – indoamericano, potencia la conciencia y memoria histórica que jamás será apagada ni alterada puesto que el pueblo se acostumbró a leer, debatir, reflexionar y a construir ideas.


Es mentira la polarización en Venezuela. Es el sentimiento patrio que aflora y será contundente el domingo 3 de diciembre en el Referéndum Consultivo sobre el Esequibo venezolano. Se acabó los tiempos de alienación, sugestión y esnobismo en el actual país de Bolívar, Sucre, Rodríguez y Miranda. En matemática, la minoría jamás está por encima de la mayoría. ▀

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