Por. José Gregorio Torres
Este miércoles 18 de enero en horas de la noche se suscitó un incendio forestal en las inmediaciones de la Avenida Gran Cacique Karachi a la atura de la quebrada de La Platera adyacente al Río Minumboc, donde una profunda vegetación compuesta por la variedad bambú, conocido científicamente como uno género de bambú así como otras variedades de plantas rastreras de mediano tamaño y gran tamaño, las que sufrieron los rigores del fuego, incendio que fue controlado y sofocado por el Cuerpo de Bomberos de Carache, y el que no se pudo determinar las causas de su origen, quedando a cargo de las autoridades competentes determinar que o quienes serían los responsables de este lamentable siniestro que causa graves daños ecológicos al ambiente.
Es necesario que se le de la importancia que tienen estos eventos y se haga seguimiento de estos incendios que se han venido suscitando de manera continua en contra de esta vegetación particularmente y con esta variedad de planta la que, según los ecologistas, es de suma importancia que se mantenga puesto que la misma beneficia en muchos sentidos en lo que respecta a la protección del agua. Está conformada por una gran variedad de plantas en américa, compuesta por unas 30 especies, esta planta que también recibe el nombre indígena de tacuara, o cañazas es de gran utilidad y beneficios del ambiente, en el caso de Carache muy importantes para la conservación de la humedad de los terrenos, contención de las corrientes de aguas superficiales y subterráneas, lamentablemente no se ha educado con respecto a los amplios beneficios e importancia de la conservación de esta planta.
Hoy cuando existen oficialmente las brigadas de Bomberos Forestales en Carache, debería de enfocarse con mayor prioridad esta situación que altera sin duda nuestra ecología y buscar las estrategias que permitan priorizar estos sucesos inesperados pero que sin duda podrían obedecer a una planificación estudiada para su erradicación, al parecer, por supuestos efectos nocivos o dañinos para los agricultores, cosa que es totalmente falsa, ojala que las propuestas hechas por algunos Productores y amigos de la ecología sean asumidas y consideradas como es el caso de la reorientación de un terreno en las adyacencias de la Avenida Gran Cacique Karachi donde antes se ubicaría la Clínica del Anticanceroso y el que su donante estaría en disposición de entregarlo para la construcción de la sede de los Bomberos Forestales, acción que sería muy bien vista por la comunidad, especialmente por los amigos y defensores de la Ecología, así como la propuesta de la Fundación Miguel Gil de la donación de unos tres mil adobes que permitirán la construcción inicial de esta sede. Esperemos respuesta positiva de las máximas autoridades del ambiente para que en lo inmediato posible se logre este importante proyecto para la comunidad.