Por. Hernán Meléndez
Ya es recurrente observar en las redes sociales peticiones de colaboraciones a personas particulares, comerciantes, asociaciones, hacer rifas, eventos para cubrir exámenes médicos, intervenciones quirúrgicas, medicamentos de alto costo, entre otros. Todo esto está sucediendo porque, el Sistema de Salud en Venezuela no está cumpliendo el objetivo final, por ejemplo: un paciente va al hospital de su comunidad, en el caso de Carache, al Hospital I “Doctor Rafael Quevedo Viloria”, allí consulta con el médico y si este considera que la afección no es de su especialidad o competencia, es referido a un especialista: cardiólogo, Urólogo o en caso más grave al oncólogo, lo que acarrea gastos en pasajes, consulta, luego, exámenes médicos, post operatorios, si es necesario, los cuales no los hacen en ningún hospital público, solo en privado y a un costo poco accesible a los venezolanos, dada la precariedad de los sueldos e ingresos particulares, luego, viene la intervención quirúrgica, según refiera el médico tratante.
A la vez, el especialista le recomienda una clínica privada, donde este trabaja o un colega del mismo, en lugar de enviarlo a un hospital público del país, donde el paciente se pueda trasladar con la seguridad que, en este sitió le van a hacer los exámenes y de ser necesario, la operación totalmente gratis, sin embargo, no es así y los que, logran un contacto para ingresar a algún hospital deben llevar hasta las jeringas, todo el equipo quirúrgico, además, el acompañante debe estar mosca para que, un amigo de lo ajeno no se lo vaya a substraer.
Por estas y otras razones expuestas, los ciudadanos se han visto en la necesidad de recaudar fondos a través de los medios antes mencionados, es decir, convertirse obligatoriamente, en un pedigüeño de oficio, cuando anteriormente, todo esto se hacía en la red de sistemas de salud público, situación que evidencia la crisis que atraviesa el Sistema de Salud en Venezuela.