Por. El Profesor Carlos Grillet
El buen gusto por la música – para referirme a un arte y el poder creador del hombre y la mujer – es una manera de conocer y de actuar, por el bien común; por tanto, se entreteje con lo que es verdadero, transformador, bello y bueno para todos y todas. El buen gusto juzga conocimientos, valores y costumbres tanto en la expresión escrita, oral, musical, visual, pensamiento, artes y naturaleza. Cada género, lógico, tiene su público y pasiones. Ahora, cuánto influye la moda y la industria cultural en lo colectivo y la publicidad para aprovecharse de la poca cultura y nula prioridad por el buen gusto.
El caraqueño, trujillano o zuliano no se refleja a la realidad de mal gusto de los contenidos de tantas canciones de Bad Bunny. Jamás. Tampoco, el “agringamiento” del vestir, lujos, mujeres y locaciones de los videos que distraen a aquellos que aplauden lo vulgar y chabacano. La belleza puede definirse como “aquello que te produce una percepción de felicidad.” El buen gusto, entre varias definiciones es” aquello que simbólicamente representa autenticidad y una esencia del cuidado por lo bello y estético”. Son leyes de la belleza y el buen gusto ¿Cómo puede ser de buen gusto el “perreo” en una fiesta de niños y que los padres, madres y representantes “cuelgan” en las redes sociales teniendo a sus pequeños como protagonistas? Contenidos de reguetón no están dadas por la belleza vocal ni los bailes o todo lo que representa esa cultura del entretenimiento que en nada es América del Sur desde la conciencia, identidad y cultura. Los goces venezolanos, si tienen una positiva devoción por lo estético y buen gusto.
La radio, redes sociales y la escuela deben responsabilizarse para incidir en los niños, niñas y adolescentes no solo en lo cognitivo, sino en lo afectivo, para lograr la sensibilidad artístico – musical y que todas sus experiencias y vivencias se reflejen en su conducta y comportamiento.
Concluir, que el juicio del buen gusto, es una manera de sentir, ante una obra, contenido musical o creación. Además, tiene que ver con el sentimiento, lo subjetivo, histórico, venezolano y latinoamericano.
No se puede entender la realidad a través de los contenidos del reguetón, bailes y estructura sonora, nunca es la concepción del hombre, la mujer y el mundo ¡viva Gualberto y Barreto! ¡Viva Vicente Fernández¡¡Viva Simón Díaz! ¡Viva Alfredo Sadel! ¡Viva Oscar De León!.
