Por. José Gregorio Torres
En estos días difíciles en los que el país parece que no tiene opciones, es importante que nuestras autoridades echen mano de las más sencillas pero muy factibles estrategias, para mantener la dinámica de quienes por no tener recursos económicos suficientes para hacer turismo lejos de sus estados, menos para practicar esta justa actividad recreativa, se ven en la necesidad de recorrer al menos algunas localidades de sus propio Estado, lo cual es responsabilidad de nuestras autoridades garantizar al menos las mínimas condiciones para atender ese flujo de turistas que seguramente se comenzarán a movilizar los días de Carnaval y en otras temporadas del año.
En vista de la importancia que tiene esta actividad que ahora se debe fortalecer en todas sus partes, nuestro Municipio tiene características propicias para que los visitantes turistas y residentes comiencen a explotar todas las bondades que esta tiene en las múltiples partes que la conforman y complementan como una actividad tan estratégica para la promoción de nuestra cultura y por , fundamental para incrementar los ingresos, beneficios de quienes puedan prestar los bienes y servicios que demanda esta comunidad tan importante para el desarrollo de la economía. Entre ellos se cuentan las personas que elaboran toda clase de comidas tradicionales, dulcería y panadería artesanal, así como también aquellas que realizan artesanías, cerámicas tejidos de toda clase obras de artes, entre otras. Así como aquellas personas que poseen viviendas con alguna habitación extra que pudiera ser alquilada como posada para los turistas o visitantes.
Ahora bien, con que cuenta Carache para ofertar como garantía de una ruta turística, en primer lugar; hablaríamos de Carache, como Parroquia, su hermosa y atractiva Plaza Bolívar, la Casa de la Cultura, el Hotel Turístico, el Salón de Sesiones, todos estos lugares de referencia históricas, Monumento de Agua de Obispo, Templo de San Juan Bautista de Carache, Colección de obras de Rodolfo Minumboc y Parque Recreacional Hermes Gudiño. Por la cercanía de la parroquia La Concepción se pudiera asumir como parte de la ruta, la comunidad locera de Betichope, el Río Cende, el templo de la Inmaculada Concepción, la Plaza Bolívar. Todo este recorrido debería contar con un vehículo acondicionado para tal fin, así como un folleto referencial que sirva de apoyo y el cual tendría un valor módico que permita su autofinanciamiento, así como otros gastos del personal de guías, los cuales convendrían contar con una buena preparación en el área. Esto es solo una idea que, si la Alcaldía contara con una Dirección de Turismo, pudiera emprender estas ideas que en mucho ayudaría a consolidar otras áreas importantes en el desarrollo económico del municipio.
