Por. José Gregorio Torres
“Sean misericordiosos como lo ha sido mi padre con ustedes” (Lucas 6.36), que mejor frase bíblica que ésta, para darle preámbulo a lo que en esta nota queremos resaltar, pues cuando se trata de contar lo que paso hace veinte años en Carache con Isabel Guedez, marca un hito en la historia de este pueblo que si bien, no escapa de algunas acciones inapropiadas por algunos de sus habitantes, tampoco se puede decir que, está fuera de lo que establece la sociedad y las sanas costumbres, pues nada escapa a esa formación humana y espiritual que en cada familia forma parte del quehacer diario de los caracheros, comenzando con la bendición de los padres a sus hijos, acción que alientan con ella a hacer el bien, a mantenerse en el buen camino y tratar con ello de minimizar las posibilidades del descarrío, desenfreno, malas acciones.
Por eso, es que cuando tenemos que rebuscar en la historia reciente de Carache, es necesario, hacer un punto y aparte, al hecho de la dignificación de un ser humano, una mujer que formó parte de esa misma historia de nuestro pueblo, esa historia humana y social que significó este acto hermoso nacido en el corazón de unas mujeres piadosas, de hombres cristianos que inspirados llevaron a cabo una encomiable obra de misericordia, la dignificación de Isabel Guedez, Chabela, fue este un acontecimiento que reivindica al ser humano, donde se puso de manifiesto el servicio a los demás, la fe y el amor por el prójimo, acto que trajo sin duda alguna, la retribución desde otras dimensiones, pues Carache recibió y sigue recibiendo bendiciones que no pueden ser cuantificadas por el ojo humano.
Fue un 19 de septiembre fecha, de gran significación a decir de Yolanda González, pero también, del Padre Francisco Linares, quien para ese entonces fungía de Párroco y guía espiritual, con ellos un ejército de mujeres y hombres sensibles a las penurias humanas, pues a ellos les correspondió formar parte de este hecho en el cual la mano de Dios estaba ejerciendo su poder, porque solo con una fuerza superior es como se logra realizar tamaña obra, que tuvo su lugar, en este hermosos Valle de San Juan Bautista, pues se cumplía cabalmente en este ser, un acto de justicia que solo Dios sabrá finalmente, porque fue ella Isabel Guedez (Chabela), el instrumento para la prueba; prueba que hoy se puede decir con satisfacción, fue superada cuando esta mujer es dignificada y con ella, aperturada la Casa del Adulto Mayor “Juan Bautista Meléndez” de Carache, lugar de referencia, donde se siente la presencia del amor de Dios, en aquellos ancianos que hoy reciben el cariño y el afecto de quienes han sido llamados a atender esta hermosa obra piadosa, desde esa Casa donde seguramente, el espíritu de los que ya se fueron, alimenta y fortalece a quienes hoy tienen la responsabilidad de irradiar esa misericordia con la que el creador ha permitido su existencia en nuestro Valle de San Juan Bautista. Veinte años que deben ser recordados cada año, con la dignificación de Isabel Guedez (Chabela).
