En las profundidades del Municipio Carache, se encuentra un asentamiento campesino que es el corazón palpitante de la tradición y la cultura local: La Ranchería. Este caserío, conocido por su gente laboriosa y su rica herencia musical, se ha convertido en un símbolo de la identidad venezolana.
Agricultura: El Sustento de la Vida La agricultura es la principal actividad económica en La Ranchería, con el café como su producto estrella. Los campos de café, junto con cultivos de zanahoria y otros rubros, se extienden a lo largo del paisaje, marcados por el trabajo constante de sus habitantes. El clima de la región, descrito como agradable y acogedor, es un aliado perfecto para la prosperidad de estos cultivos.
Música: El Alma de la Comunidad La música resuena en cada rincón de La Ranchería. La parranda Carachera, una expresión artística que brota de las raíces de este lugar, es una manifestación de la alegría y el espíritu comunitario. No es raro encontrar a alguien que no toque un instrumento de cuerda, ya que la música es una parte esencial de la vida cotidiana aquí.
Familias Fundamentales Las familias Graterol, Fuentes y Duran son pilares de La Ranchería. A través de generaciones, han compartido amistades que trascienden el tiempo, enseñanzas de vida y una hospitalidad que invita a cualquier visitante a sentirse como en casa.
Mujeres de La Ranchería: Pilar de Fortaleza Las mujeres de este asentamiento son un ejemplo de fortaleza y dedicación. Su participación activa en la recolección de café y en las labores agrícolas es testimonio de su carácter trabajador y resiliente.
La Experiencia de Visitar La Ranchería: Visitar La Ranchería y no quedarse al menos una noche es perderse una experiencia cultural auténtica. La hospitalidad de sus habitantes y la belleza natural del lugar hacen de este caserío un destino imperdible para aquellos que buscan conocer la verdadera esencia de Venezuela.
Hernán Meléndez Reportero Comunitario.
